La Gimnástica tiene gol y a estas alturas de pretemporada no es un dato que haya que dejar pasar por alto. El equipo de Manu González desarboló con actitud, fútbol y efectividad a un Real Valladolid B cargado de talento y juventud, que no pudo con los azulgrana en el Trofeo del Instituto Municipal de Deportes, que se quedó en Segovia gracias al triunfo local (4-2).

Es tiempo de pruebas, y Manu González apostó por el 4-1-4-1 en la primera mitad con Ivi en punta y Borrego en una banda, donde el salmantino puede llegar a ser tan efectivo y peligroso como en vanguardia. Precisamente fueron las asociaciones de ambos las que generaron peligro en los primeros compases de partido que estuvieron marcados, sin embargo, por una falta de entendimiento entre Javi Marcos y Christian que terminó con un autogol y la delantera para los blanquivioletas. Pronto la Gimnástica tomó las riendas del partido bajo la tutela de un centro del campo con Manu, Domingo y Asier que se hicieron con el balón parar habilitar a unos acertados Abad y Borrego que buscaban entenderse con Ivi. Una falta escorada a la derecha cometida sobre Abad sirvió para que Rubén mandará el balón a la red ajustando el palo el esférico.

El empate espoleó a los locales, y una buena jugada de Dani Abad encontró el rechace del portero visitante y Borrego, cual brazo ejecutor, mandó a la jaula el segundo para los de Manu González. No estaba mal para la pretemporada: césped perfecto, tarde noche agradable, rival propicio y buen ambiente en tribuna. «Es mucho once ese once», comentaban en la grada con respecto a Borrego.

Con el triunfo parcial se llegó al descanso y comenzó el baile de cambios que permitió a la Gimnástica ampliar la renta después de una transición fulgurante con Dani Arribas y Borrego  que culminó Elías, bien posicionado durante los cuarenta y cinco minutos que jugó, con presencia en la medular y talento en la definición. Acto seguido, y con el filial pucelano asentando a los jugadores nuevos en el verde de la Albuera, Gómez hizo el cuarto gracias a una porfía por un balón que parecía imposible de alcanzar, pero que el bravo delantero termino alojando en la red favorecido por un error del cancerbero, que no acababa de ubicarse recién entrado al partido. Aplausos, muchos, para el jugador por su brega, y por no dar por perdida una pelota.

Con el partido muy cuesta arriba, el Valladolid B – en Segunda B esta campaña, conviene recordarlo – apeló al escudo que portaba en el pecho y buscó con ahínco el maquillaje para camuflar una derrota contundente. Después de varias oportunidades en las que pudo lucirse David García, tuvo que ser Doncel el que acortara distancias hasta el 4-2 definitivo.

Hubo minutos para Centeno, Peli, Hoyos o Arévalo que no desentonaron, y tanto Álex Conde como Calleja demostraron tener olvidadas sus lesiones de final de la temporada pasada. El próximo sábado el Getafe B exigirá más a la Gimnástica en el V Trofeo Diputación de Segovia en un partido en el que los que tuvieron menos tiempo, como Rui, arrancarán de inicio así como otros futbolistas que no entraron en convocatoria en el partido ante los jugadores entrenados por Javier Baraja.