Manu González, el entrenador de la Gimnástica Segoviana, compareció en sala de prensa visiblemente satisfecho después del resultado cosechado ante el Almazán (2-0), después de un partido en el que los gimnásticos – sobre todo en la primera mitad – desplegaran un fútbol vertical y ofensivo que desarboló las previsiones y esperanzas sorianas.

«Me alegro de que el equipo haya divertido, pero lo importante es que hemos ganado porque era un partido complicado», aseguró Manu.  Con respecto al 5-3-2 planteado de inicio con Javi Marcos, Anel y Juan de la Mata como trío defensivo, el entrenador madrileño expresó su satisfacción por el rendimiento del equipo «a pesar de que no lo hemos trabajado mucho», dijo. «La circulación del balón ha sido mejor que otros días, y aunque en la segunda parte hemos bajado el ritmo, era importante dar minutos a Álex Conde y Agus Alonso, que aunque no están mejor que Dani Arribas o Elías, entendimos que tenían que jugar», explicó.

En torno a la conveniencia del sistema para otros partidos, el preparador sostuvo que el planteamiento «es independiente del rival que toca. El hecho cierto es que nos falta profundidad en banda desde la baja de Kike. Calleja y Sani Arribas no son jugadores de banda y la plantilla se amolda mejor a jugar con laterales largos y dos puntas», esbozó. La jornada le ha salido redonda a la Gimnástica con los empates de Arandina, Zamora y Numancia B con lo que el equipo está a un partido tan solo del primero puesto. «No podemos pinchar más, y tenemos que estar preparados para cuando los demás tropiecen», concluyo Manu.

El enfado de Diego Rojas

El entrenador visitante mostró su contrariedad en rueda de prensa y mostró su disgusto «por fallar tantos pases, que es precisamente nuestro punto fuerte», explicó. Diego Rojas reconoció que a su equipo le costó adaptarse al cambio de sistema de la Gimnástica. «Hemos hecho una mala primera parte, y nos han hecho multitud ocasiones. Si no llegas a puerta es difícil hacer goles», lamentó.

Pese a la derrota, el entrenador soriano reconoció el trabajo de sus jugadores y la superioridad de su rival. «El nivel competitivo de la Gimnástica es superior al nuestro», concluyó.