Sin apenas descanso, la Gimnástica mide sus fuerzas con el CD Bupolsa el próximo domingo en La Albuera a las 17.00 horas. Con las bajas confirmadas de Abad – que sigue su proceso de recuperación tras la rotura de uno de los dedos de la mano – y de Calleja por su expulsión durante el partido del Zamora, la Gimnástica al menos ha recibido con alivio la noticia que apunta que la lesión de Borrego es menos importante de lo que parecía en un principio, e incluso podría reaparecer mucho antes de lo previsto. En cualquier caso el criterio de la prudencia prevalecerá y no se forzará su concurso hasta no estar plenamente recuperado. Dani Arribas con un proceso gripal y una gran fatiga muscular no se entrenó el jueves, pero podría estar disponible para el domingo aunque dependerá de su evolución. Jugadores como Sales, Astray o Gómez que acabaron muy cargados el partido del miércoles podrán, en principio, disputar el encuentro sin problemas.

Después del empate cosechado contra el Zamora que dejó sensación agridulce en las filas segovianas, la tarea del cuerpo técnico ha sido por un lado regenerativa en cuanto a lo físico, y de refuerzo de la moral por otro. «Creo que este año vamos a hacer cosas importantes», destaca Manu González, preparador gimnástico. «El resultado del partido con el Zamora es totalmente injusto, te quedas con la sensación de que pudiste meter más goles, y ahí estuvo la clave más que en las decisiones arbitrales. En cualquier caso el partido también nos mostró muchas cosas positivas», resumió González.

El domingo llega a Segovia el Bupolsa. «Es un equipo muy sólido, saca puntos tanto en casa como fuera», sostiene González. «Tiene buenos laterales, un doble pivote agresivo y unos delanteros de los importantes de la categoría; además han conseguido una posición cómoda en la tabla y seguro que esperan mejorarla», concluye.

Sergio Arévalo: «A todos los jugadores de mi edad le gustaría estar en mi situación»

El juvenil Sergio Arévalo ya sabe lo que es contar con minutos en Tercera con el primer equipo. Lateral con mucho recorrido, e incluso extremo, el joven jugador segoviano reconoce estar «muy contento». «A cualquier jugador de mi edad le gustaría estar en mi situación», apunta. «Intento hacerlo lo mejor posible en los entrenamientos para que me den la oportunidad de poder jugar», añade.

Consciente de la dificultad de tener hueco en el once, Arévalo aboga por el trabajo diario como mejor forma de conseguirlo. «No es fácil llegar hasta aquí siendo juvenil», reitera. En cuanto a su demarcación en el campo, el segoviano tiene claro que le resulta «indiferente» donde jugar. «Me gustaría seguir como estoy, entrenando con el equipo y jugando si es posible», concluye.