La Gimnástica Segoviana sumó tres puntos más a costa del CD Cebrereña en partido del que Manu González, entrenador local, salió «encantado», según reconoció en rueda de prensa. La Segoviana, pese a no crear excesivas ocasiones de gol en los primeros setenta minutos, logró imponerse (2-0) a un equipo abulense que evidenció ganas de salir de la zona baja de la tabla en base a un generoso esfuerzo físico, pero que tendrá que ver la manera de suplir la ausencia de David Terleira con algo más de mordiente en ataque. No se puede mantener el rigor táctico defensivo y luego desatarse en ataque. Al menos la Cebre no pudo hacerlo ante la Gimnástica.

Manu González planteó un partido con algo más de juego combinativo que en otras ocasiones, con la verticalidad como premisa y colocando a Abad en la izquierda y a Calleja en la derecha, pero con algo más de inercia hacia el centro. La primera ocasión fue precisamente para Abad, que mandó un testarazo al palo después de un envío de Adrián, que aprovecha el hueco que le ofrece Calleja para desdoblarse siempre con peligro. Pocas ocasiones más tuvo la Gimnástica en la primera parte, salvo una transición bien llevada por Abad, que dejó a Conde libre de marca para mandar alto un balón de esos que no perdona el manchego, que arrastra problemas físicos y que descansará ante el Uxama por acumulación de tarjetas.

Con una Gimnástica con mucho criterio pero poco punch, apareció Mika para mandar a la jaula en el minuto 43 un balón enviado desde el costado izquierdo sorprendiendo a Gordo con un gran disparo. Mika sigue sumando goles, aportando pelea, rematando casi todo y cuando tiene que escorarse a la izquierda, poniendo balones con mucho peligro. Agus Alonso, ya con el alta bajo el brazo, empieza a relamerse pensando en su posible sociedad con el cántabro. Están condenados a entenderse y formar una de las mejores parejas de delanteros de toda la Tercera.

En la segunda parte, la Segoviana metió una marcha más al juego, pese a que el verde está todo lo irregular que se espera por las condiciones climatológicas que sufre.  La Cebrereña entró en la reserva y su actitud defensiva quedó reducida a la mitad. Un balón desde la esquina lo empujó sin oposición Charly a la red en el ecuador de la reanudación, y el partido murió entre intentos de Abad por meter su gol, esfuerzos de Gómez por agradar a su entrenador para que le conceda más oportunidades, y una Cebrereña que apenas inquietó a Facundo, que pasó más frío que peligro en toda la tarde.

Los dos de arriba no ceden y la Segoviana sigue afrontando la parte más amable del calendario. El próximo sábado el equipo de Manu rinde visita al Uxama, en un partido que debe servir para que los azulgrana retome la senda victoriosa fuera de su propio terreno de juego.

Foto: Juan Martín